I
a1
1 f. Primera letra del alfabeto. Se pronuncia con los labios muy abiertos, y los dientes separados aproximadamente 1 cm; la lengua, con el dorso elevado hacia la línea de separación entre el paladar duro y el velo del paladar, y rozando con la punta los dientes inferiores, mientras los bordes siguen los molares inferiores. En la escala de altura, la "a" ocupa el lugar medio, después de la "i" y la "e" y antes de la "o" y la "u". Su nombre es su propio sonido. Letra griega correspondiente, "alfa".
2 Mús. En la notación alfabética representa la *nota "la".
II
a2 (del lat. "ad")
1 prep. Se emplea fundamentalmente para formar el complemento indirecto, y a veces el directo, y para expresar dirección. Complemento, dirección.
2 Expresa también comparación: "De uno a otro hay mucha diferencia".
3 Distancia: "A 10 Km de Madrid".
4 Distribución: "A tres por cabeza. Cinco pesetas a la peseta".
5 Estilo: "A la española. A la jineta".
6 Instrumento: "A lazo. A mano".
7 Lugar: "A la puerta de su casa".
8 Tiempo: "A las tres. Al principio. A 12 de agosto".
9 Simultaneidad con un suceso: "Al paso de la procesión. A la salida del Sol".
10 Medida: "A palmos. A kilos".
11 Medio: "A martillazos [o a golpes de martillo]".
12 Número: "A docenas. A millares".
13 Precio: "A cien pesetas el kilo".
14 Forma o dibujo: "A rodajas. A cuadros. A listas. A lunares. A motas. A pintas".
15 (con el verbo "ir") También expresa otras relaciones, como acción inminente: "Voy a trabajar. Va a llover".
16 Orden: "¡A trabajar!".
17 Finalidad: "Salió a despedirme".
18 Simultaneidad de acciones expresable con un gerundio: "Le vi al pasar, me lo tropecé al venir".
19 (en la contracción "al" y con un infinitivo) Causa o consecuencia: "Al no encontrarle, le dejé un recado. Al no verme, se marcharía". V. más adelante otro tipo de expresiones causales o consecutivas en que el empleo de "a" no es general.
20 Tiene valor condicional en algunas frases en que precede a un infinitivo: "A juzgar por sus palabras, el acuerdo parece inminente".
21 Delante de un adjetivo calificativo, equivale a "en cuanto a, en el aspecto de": "A listo no hay quien le gane".
22 Hay un grupo de relaciones expresables con "a" que, aunque no tienen carácter de generalidad, pues se forman con unas palabras y no se forman con otras (se dice "al contacto de", pero no "a la proximidad de"; "al influjo de", pero no "a la influencia de"; "al amparo de", pero no "a la protección de", etc.), son consideradas normales y nadie pone en duda su legitimidad. Pueden agruparse en la denominación general "influencia". Contacto: "al contacto de, al roce de". Determinación: "al compás de, al conjuro de, al influjo de, a una seña de, al son de, al toque de". Exposición: "al aire, al humo, a la luz, al sol, a todos los vientos". Protección: "al amparo de, al arrimo de, al calor de, a la sombra de".
23 Aparte de esas relaciones, hay verbos que exigen "a" en su régimen como su preposición propia: "Echarse a volar. Jugar a la baraja. Oler a chamusquina. Saber a limón".
24 Y hay infinidad de modismos de los más netamente modismos, es decir, de aquellos en cuya construcción hay una irregularidad gramatical o de lógica, formados con "a": "a banderas desplegadas (aquí "a" desplaza a "con"), a campo traviesa, a cuenta, a buena cuenta y a mala, a las duras y a las maduras, a escondidas, a mano (cerca), a pie juntillas, a pierna suelta, a partir un piñón, a puerta cerrada, a sabiendas".
¡A que...! [o ¿A que...?]. Expresión (probablemente elipsis de "qué te apuestas a que...") con que se muestra *convencimiento, que se opone a la duda o negativa de otros, de que ocurrirá lo que se expresa a continuación: "¡A que llueve esta tarde!", "¡A que te caes!". A veces envuelve temor: "¡A que no le encontramos en casa!". Y otras veces, sobre todo en frases negativas, incitación o *desafío: "¡A que no se lo dices a él!".
¡A que sí [o no]! Exclamación del mismo sentido que las anteriores, empleada como respuesta.
¿A qué [viene]...? Expresa censura hacia la cosa que se dice a continuación, que se encuentra improcedente: "¿A qué tantas protestas?". *Censurar.
. Notas de uso
Puede decirse de "a" con respecto a las preposiciones lo mismo que de "que" con respecto a las conjunciones; esto es, que tiene cierto poder absorbente, por el que sustituye en muchos casos a otras preposiciones y hasta a expresiones complejas.
Además de las relaciones en que el empleo de "a" constituye regla general o de las otras que, aun no ocurriendo así, son tenidas como normales y no discutidas, existen relaciones modales de diversas clases en que, de los nombres susceptibles de expresarlas, unos forman con "a" la expresión correspondiente y otros no admiten esta construcción: se dice "a su gusto, a su sabor", pero no "a su bienestar" o "a su conformidad"; se dice "a juicio de, al parecer de" (donde "a" desplaza a "según"), pero no se dice "a opinión de"; se dice "a contrahílo, a contrapaso, a contrapelo, a destiempo", pero no se dice "tabla hecha a contrachapado, bailar a contradanza" o "encolado a contrapeado". Y lo mismo puede decirse de algunas expresiones causales o consecutivas: se dice "a consecuencia de", pero no "a resultado de".
La dificultad respecto de tales grupos de expresiones está en que las formables con "a" son demasiado numerosas para tenerlas todas en cuenta para incluirlas como modismos. Así resulta que hay desorientación respecto a la legitimidad del uso de infinidad de expresiones con "a" de uso general y frecuentísimo; algunos autores condenan, por ejemplo, expresiones como "a causa de, a condición de" o "a pretexto de" sin más razón que la de parecerse a otras expresiones francesas, a pesar de que hay otras aceptadas como "a calidad de, a consecuencia de, a fuer de, a fuerza de, a puro de, a razón de", etc., que son enteramente semejantes (compárese particularmente "a calidad de" con "a condición de").
Hay particularmente un grupo de expresiones cuya legitimidad es muy discutida; son aquellas que están formadas con un nombre seguido de "a" más infinitivo, que equivalen a una oración con "que hay que" o con "destinado a": "otra cosa a tener en cuenta, plazas a extinguir, efectos a pagar, un ejemplo a seguir, cinco libros a elegir". Se trata de un galicismo sintáctico de creciente auge debido sobre todo a su brevedad.
A continuación se da una serie de expresiones que se construyen con "a": "a base de, a caballo, a la cabeza (delante), a calidad de, a campo traviesa, a causa de, a consecuencia de, al contrario de, a costa de, a cuenta de, a diferencia de, a discreción, a [las] espaldas [de], a favor de, a fuerza de, a gusto, a horcajadas, a lomo[s], a palo seco, a paso de buey [de carga o de tortuga], a piedra y lodo, a partir un piñón, a placer, a plana y renglón, a puro, a raíz de, a razón de, a reserva de, al revés de, a saber, a salto de mata, a salvo, a su entera satisfacción, a voluntad".